Me imaginaba si eso era una palmera, en los cocos bien podrían caber casitas tipo hobiton del señor de los anillos.... jejeje
lo que me gustaba de subirme a los árboles y quedarme allí largo rato cuando era chica es que no había nadie más, el problema de ese árbol es que imagino que hay demasiada humanidad por allí arriba.
mmmmhh esto me borra los comentarios, intento otra vez jejeje
decía que lo que me gustaba de chica de subirme a los árboles y quedarme allí largo rato es que no había nadie más. El problema de ese árbol es que se me hace que hay demasiada humanidad allí ariba...
Tienes razón anónimo... demasiada humanidad. Pero al no haber aceras algunos se caen pronto del árbol por idiotas... luego, al ho haber carreteras, la mayoría no salen de sus casas porque para qué si no pueden coger el coche... así que sólo queda salir por los tejados, irse por las ramas... y eso mola
Usted dice que eso terminaría siendo un pueblo donde solo habiten aquellos que se animen a trepar por los tejados? Ahora sí que me gusta esto! Y sin autos! Con suerte si los idiotas se caen rápido tampoco quedan políticos ni empresarios. Falta una pequeña huerta comunitaria, una vista al mar y me cumplió el sueño de mi hogar de sueños ;)
Veamos... huerta comunitaria, vistas al mar, apuntado. Haré el consiguiente pedido para Navidad. Miéntras tanto podríamos colgar los tomates de las ramas, con cestitas curiosas... y el mar, bueno, si te sube hasta la rama más alta de árbol seguro que se ve. De todas maneras... estaría permitido bajar del árbol, conocer mundo y todo eso. Lo único es que eso de hincarle la excavadora a la tierra para plantar casitas en macetas de cemento, pues no. Quién quiera cimientos para sentirse seguro, que se vaya del árbol, o estudie para funcionario
mmmmmhh tomates no, colguemos manzanas de las ramas mejor, esas brillosas y coloraditas... el mar, a veeer, pues con un pequeño mirador en la rama más alta donde tal vez haya unas hojitas perennes donde se acumule la arena que trae el viento, y esa brisita con gusto a mar ayyy con eso ya soy feliz eh. Eso de conocer el mundo, tal vez sería una buena excusa para esperar el otoño, que esas hojas que se caen sean algo así como barquitos que lleven a conocer otros árboles.. digo, otras ciudades.
No es mala idea, la verdad que entran ganas de subirse al árbol. Bonita Imagen.
ResponderEliminarToqui.
Me imaginaba si eso era una palmera, en los cocos bien podrían caber casitas tipo hobiton del señor de los anillos.... jejeje
ResponderEliminarlo que me gustaba de subirme a los árboles y quedarme allí largo rato cuando era chica es que no había nadie más, el problema de ese árbol es que imagino que hay demasiada humanidad por allí arriba.
mmmmhh esto me borra los comentarios, intento otra vez jejeje
ResponderEliminardecía que lo que me gustaba de chica de subirme a los árboles y quedarme allí largo rato es que no había nadie más. El problema de ese árbol es que se me hace que hay demasiada humanidad allí ariba...
Tienes razón anónimo... demasiada humanidad. Pero al no haber aceras algunos se caen pronto del árbol por idiotas... luego, al ho haber carreteras, la mayoría no salen de sus casas porque para qué si no pueden coger el coche... así que sólo queda salir por los tejados, irse por las ramas... y eso mola
ResponderEliminarUsted dice que eso terminaría siendo un pueblo donde solo habiten aquellos que se animen a trepar por los tejados? Ahora sí que me gusta esto! Y sin autos! Con suerte si los idiotas se caen rápido tampoco quedan políticos ni empresarios. Falta una pequeña huerta comunitaria, una vista al mar y me cumplió el sueño de mi hogar de sueños ;)
ResponderEliminarVeamos... huerta comunitaria, vistas al mar, apuntado. Haré el consiguiente pedido para Navidad. Miéntras tanto podríamos colgar los tomates de las ramas, con cestitas curiosas... y el mar, bueno, si te sube hasta la rama más alta de árbol seguro que se ve. De todas maneras... estaría permitido bajar del árbol, conocer mundo y todo eso. Lo único es que eso de hincarle la excavadora a la tierra para plantar casitas en macetas de cemento, pues no. Quién quiera cimientos para sentirse seguro, que se vaya del árbol, o estudie para funcionario
ResponderEliminarmmmmmhh tomates no, colguemos manzanas de las ramas mejor, esas brillosas y coloraditas... el mar, a veeer, pues con un pequeño mirador en la rama más alta donde tal vez haya unas hojitas perennes donde se acumule la arena que trae el viento, y esa brisita con gusto a mar ayyy con eso ya soy feliz eh. Eso de conocer el mundo, tal vez sería una buena excusa para esperar el otoño, que esas hojas que se caen sean algo así como barquitos que lleven a conocer otros árboles.. digo, otras ciudades.
ResponderEliminarme gustaria vivir en tantos lugares!!!!
ResponderEliminarmientras no sea en la ciudad!
bue.. habra q nacer pajaro! muajaja
saludos cordiales
Georgi.